Lampara Dr. Mach LED-130

Reproducción de color superior

Con un índice de reproducción cromática excepcional Ra = 95, el cirujano reconoce claramente los más pequeños matices de color en el tejido. El espectro de colores del campo quirúrgico se representa de forma natural con un rico contraste. La luz proporciona claramente un alivio bienvenido a sus ojos.

Sistema de lentes múltiples facetadas

Una multitud de lentes facetadas calculadas por computadora garantizan la homogeneidad y la menor sombra en el campo de luz. Los sistemas ópticos dispuestos por separado, con un módulo LED, generan su propio campo de luz, lo que aumenta el efecto de contraste. Se pueden alcanzar sin dificultad intensidades de luz de 100.000 lux.

Panel de control en la carcasa de la luz

Las siguientes funciones de luz se pueden controlar en la carcasa de luz:

• Encendido / apagado (mecánico)
• Control de brillo electrónico.

Enfoque

El campo de luz se puede enfocar girando el mango. El haz de luz enfocable permite una iluminación puntual de los canales de la herida más profundos con la intensidad de la luz y una coincidencia exacta del diámetro del campo de luz con el tamaño del campo de la herida.

Manejo

Durante el desarrollo, se prestó gran atención a la facilidad de manejo y la gran facilidad de mantenimiento. Además, la forma de anillo que mejora el flujo y la superficie mínima evitan cualquier aumento de calor en el área de la cabeza del cirujano y crean un rendimiento de flujo laminar perfecto. La luz se puede colocar exactamente en el campo de la herida.

Larga vida útil / bajo consumo de energía

La vida útil de más de 60.000 horas de funcionamiento reduce considerablemente los costes de cambio y sustitución de los iluminantes, en comparación con la tecnología halógena convencional utilizada con las antiguas luces OT. Mediante la implementación de la tecnología LED, el consumo de energía podría reducirse en más del 50% con respecto a las luces halógenas convencionales.

Luz fría

La tecnología LED es mucho más eficiente que las fuentes de luz convencionales como las bombillas halógenas. La radiación de calor se reduce al mínimo sin utilizar ninguna técnica de filtrado costosa. El aumento de temperatura en el área de la cabeza del cirujano es imperceptible.